Hoy se celebra por cuarto año consecutivo el Día Nacional del vino en Chile, tras su institución en 2015 por la expresidenta Michelle Bachelet. El acto conmemora la petición de Pedro de Valdivia al Rey Carlos V de España de traer «vides y vinos» a nuestro país, con función evangelizadora.
Tras el evento popular organizado por Vinos de Chile junto con la Municipalidad de Santiago el pasado sábado 1 de septiembre en el parque Quinta Normal, donde las familias se dieron cita para pasear, escuchar música, participar en las actividades infantiles y degustar un buen vino chileno (en el caso de los adultos), hoy se dio el pistoletazo de salida oficial.
El lugar elegido para el acto presidencial fue la Viña Santa Carolina, en Macul. Allá, el Ministro de Agricultura, Antonio Walker, el presidente de Vinos de Chile, Mario Pablo Silva, y el gerente general de la propia viña, Santiago Larraín, ofrecieron unas palabras en homenaje al producto alimenticio de exportación más importante de Chile, poniendo un énfasis muy especial en el laborioso trabajo de los campesinos que se encuentra detrás de cada botellas.
Como novedad, este año se concedió por primera vez el Premio Nacional del Día del Vino, que recayó Bernarda Catalán, de la Viña Santa Carolina, y Jorge Quintero, de la Viña San Pedro, como reconocimiento a toda una vina dedicada al trabajo en ambos puntos de producción. La actividad culminó con un brindis de las principales autoridades del mundo de la agricultura, vino y turismo de Chile.
Respecto al reclamo turístico internacional que el vino supone para Chile, el Ministro de Agricultura declaró para Enoturismo Chile:
“Es muy importante tener una tremenda unión entre la agricultura chilena y el agroturismo porque este país, lo que nos caracteriza, nuestra cultura y tradiciones, es reconocido mundialmente por nuestros productos agrícolas: el embajador que ha sido el vino (chileno) en el mundo. […] Además tenemos la cordillera de los Andes, el desierto, la Antártida, que hacen que sea un país muy atípico. Y por esa condición geográfica produce alimentos tan saludables que nos han hecho reconocidos en todas partes del mundo”.
A esta reflexión sobre el maridaje entre vino y turismo, la Subsecretaria de Turismo, Mónica Zalaquett, añadió:
“El vino está íntegramente relacionado con el turismo. Por eso es importante trabajar de manera colaborativa. Dentro de nuestra diversificación de oferta de productos turísticos está el enoturismo, que está reaccionando muy bien porque gusta mucho a nuestros visitantes. […] En lo que va de año, ha aumentado un 38% de visitas a las viñas”.
Prueba del éxito de la actividad turística y ocio ligado al universo vitivinícola, es que con motivo de este gran evento anual, el sector del enoturismo nacional se ha alzado con numerosas actividades que acercan al público chileno la extensa cultura del vino: degustaciones, tours por viñas y bodegas y ofertas de hostelería en panoramas muy entretenidos por todo el país.
Por ejemplo, Viña Montes realizará sus tours principales con un 30% de descuento hasta el 9 de septiembre. Durante el mismo período, la Viña MontGras presentará descuentos en sus interesantes recorridos para disfrutar en familia. Sumándose a la iniciativa, Viña Ventisquero tendrá un 25% de descuento en su Hiking Apalta y ofrece una degustación premium por un módico precio. Además, en el Valle de Casablanca, están previstos distintos tours en 2 o 3 viñas cada sábado.
Para cerrar un fin de semana de enaltecimiento de las actividades ligadas a nuestro exquisito y variado vino chileno, el bar de vinos La Vinocracia, en Plaza Ñuñoa, presenta su evento #BarraBrava hoy 4 de septiembre a las 19:00 h, con una oferta de más de 50 vinos distintos, procedentes de 40 viñas colaboradoras confirmadas, por un precio imbatible. Actividad perfecta para dar cierre a la cuarta edición de una celebración reciente, que cada vez toma más fuerza al reflejar la riqueza vitivinícola de Chile e inmensidad de actividades que de ella se desprenden.
Viva el vino chileno. Porque el vino es Chile.